sábado, 14 de abril de 2012

"POEMA 20, UNA TELA", Susana Cerdá.

Una tela, un paño cualquiera, una textura.
Que sirva para, que se amolde, que absorba, reciba.
Lo esponjoso de la cosa.
Una piel, una lengua, un papel fino.
Algo que se preste.
Una intencionalidad volcada hacia eso que sale y sale.
Se desparrama, desborda, cae.
Líquido que corre buscando una superficie para seguir.
Forma que estalla de una forma y espera. ¿Espera?
Suspendida por su propia densidad, esperada por su mismo
volumen, avanza siguiendo su sentido. De ser sentida
por otra forma.
Contenida se transforma en contenido.
Se guarece en el pliegue de la textura.
Pequeñas lagunas que no terminan de ser absorbidas trazan
huecos.
Se demora, emana. El corte.

Un tejido, un cuerpo que soporte el drenaje interminable de
esta corriente.
Un espacio que haga posible el sueño de llegada. (¿La pro-
mesa de una conclusión?)
Un modo que diga de un tiempo de articulación.
El toque.
El toque de queda. Lo artificioso del silencio.

Susana Cerdá.

Pintura de Teresa Lapayese Puebla.