El sol,
la luna,
las estrellas que cautivan
con su brillo desmedido,
las flores que se abren al día,
la carne que se abre al deseo…
Todo aquello que amamos
ya nunca
nos abandona,
aunque le demos la espalda,
aunque cerremos los ojos,
aunque desangremos los recuerdos.
Siempre queda la marca
de una gota
esperando a que nuestras yemas
despierten el calor
que duerme en su cerco seco.
(Mayte Llera, Dalianegra)
Pintura: "Tulipán rojo y blanco con Venus" (2010), Sherrie Wolf