lunes, 18 de febrero de 2013

"SOBRE LA SUMISIÓN" (EL COLLAR DE LA PALOMA), Ibn Hazm


¿Volverán para nosotros los tiempos de la unión?
¿Tendrán un límite las vueltas de esta Suerte?
La espada se ha hecho sierva del palo.
La cautiva gacela se ha tornado león.

* * *

Cuando haces reproches, soy el más vil de los condenados a muerte.
La  falsa monedilla que rechaza la mano del cambista.
Pero, además, hallo placer en morir por tu amor.
¡Qué maravilla la de un condenado a muerte que se alegra!

* * *

Si los Persas hubieran visto el fuego de tus mejillas,
se habrían pasado sin emperadores ni magos.

* * *

Has venido a mí con una cara a la que agrada acercarse
y de cuyo lado enoja irse.
Mi condición no repugna que me hagas unos pocos reproches,
aunque se censuren las canas en el pelo.
El hombre, en sus adentros, a veces se reprocha a sí mismo,
y los puntos negros y los lunares agracian el rostro.
Pero es si son pocos, porque cuando son demasiados
lo estropean. ¿Quién alabará la demasía?

* * *

Ayúdale, porque de apenado que está,
llora, siendo a la vez papel, tinta y escrito.

* * *

No es reprobable rebajarse ante quien amamos,
pues en amor el más orgulloso se humilla.
No os maravilléis de que me someta en mi situación,
pues antes que yo se sometió al-Mustansir.
El amado no es nuestro parigual
para que, cuando le aguantes, tu aguante sea vil.
Si una manzana te cae en la cabeza y te hace daño,
el que después la despedaces, ¿será una venganza digna de fama?

* * *

Aprovecha la ocasión, porque has de saber
que las ocasiones pasan más deprisa que el relámpago.
¡Cuántas cosas que eran hacederas dejé para más tarde,
y luego, una vez idas, se hicieron nudos en mi garganta!
Date prisa a coger el tesoro que hallaste;
Arrebata la presa como el halcón en acecho.

Ibn Hazm

Pintura: "La muchacha persa" (1901), William Clarke Wontner.