Corres sobre el ocaso de mi piel,
y dejas detenida,
esta ofrenda de lunas
al templo de tus labios.
Juegas, con la noche que vierten
mis axilas,
en la tierra que quema entre tus manos.
Y anidan en tus muslos
los febreros,
en donde me sumerjo
con húmedos lamentos de felino.
María Teresa González,
(De su poemario "Con húmedos lamentos de felino").
Pintura de Fattah Hallah.
y dejas detenida,
esta ofrenda de lunas
al templo de tus labios.
Juegas, con la noche que vierten
mis axilas,
en la tierra que quema entre tus manos.
Y anidan en tus muslos
los febreros,
en donde me sumerjo
con húmedos lamentos de felino.
María Teresa González,
(De su poemario "Con húmedos lamentos de felino").
Pintura de Fattah Hallah.